Una crema para cada tipo de piel

Una crema para cada tipo de piel


 
Una piel sana refleja belleza y buena salud. Identifica tu tipo de piel y la crema que debes usar para hidratarla.
Mantener la piel hidratada puede resultar difícil si no usas los productos apropiados para tu tipo de piel.
 
Cuando a la piel le falta agua se vuelve más flácida, por lo que nutrirla es vital para que pueda regenerarse y evitar que se seque. Todos los tipos de piel pueden deshidratarse: las pieles secas, por su escasa producción de sebo; y el resto, por el uso de productos decapantes.
 
Una crema hidratante para cada tipo de piel
 
Existe una amplia gama de productos en el mercado entre los que podemos elegir para hidratar la piel, pero hay que tener en cuenta si lo que prefieres son las cremas, leches, aceites, etc. En caso que te decidas por la leche corporal, elije una que no sea grasa.
Piel normal
 
Si tienes este tipo de piel, eres una persona afortunada porque no necesitas tantos cuidados; sólo debes mantener la hidratación natural de tu piel.
 
Para piel normal, elige productos de texturas fluidas como leches corporales a base de aceite de jojoba o manteca de cacao; así la piel no te quedará pegajosa.
 
Piel seca y sensible
 
 Si sientes que tu piel está rasposa, como si tuvieras escamas, es recomendable que uses aceites y emulsiones, ya que la hidratan mucho mejor. Además, previenen la aparición de arrugas.
 
Piel mixta o grasa
 
Las pieles grasas producen de manera natural, más sebo de lo normal, por eso es común que sean más brillosas o luzcan grasientas.
 
Para lograr una buena hidratación en tu piel grasa, elije cremas de textura ligera que contengan, por ejemplo, leche de burra o algunos productos cítricos, como el limón.